LOS PROFESIONALES, UNA GRAN SERIE BRITANICA DE LOS AÑOS 80’S.

La serie comenzó a emitirse en Inglaterra el 30 de diciembre de 1977. Trataba sobre George Cowley, quien era el jefe del ficticio servicio de inteligencia criminal CI5 y de sus dos mejores agentes, Doyle, interpretado por Martin Shaw, quien había hecho su aparición en The new avengers. Había audicionado para el papel de Ray Doyle con pocas ganas y quedó, al ser un actor con aspiraciones, no le convencía el vuelo menor que tenía el personaje, pero al no haber nada interesante aceptó y firmó el contrato.

Bodie era interpretado por Lewis Collins, pero no fue el quien era Bodie en principio, sino que era Anthony Andrews, quien incluso llegó a grabar el episodio piloto en junio de 1977. Al no tener nada de química con Martin Shaw, situación que era más que evidente, decidieron excluirlo de la serie y allí se acordaron de un tal Lewis Collins, quien había trabajado junto a Shaw en the new avengers, se lo convocó, hizo una prueba que paso con facilidad y se rehízo lo filmado.

Fue un gran éxito a finales de los años 70 y sus protagonistas recibieron reconocimiento en varias partes del mundo, convirtiéndose el programa con el paso del tiempo en una serie de culto. Las características marcadas de sus personajes los hacia atractivos. Doyle era pendenciero y despreocupado, aunque mucho más humano, Bodie también lo era y además era racista.

Su jefe Cowley era un malhumorado pero que caía bien, flexible para los giros inesperados de algunas situaciones, congeniaba con sus subordinados y también cuando la situación lo ameritaba no dudaba en tomar un arma el mismo y entrar en acción. Entre los tres, más de una vez debieron recurrir a métodos cuanto menos poco éticos, pero arropados bajo el mando de una supuesta autorización para tomar cualquier acción que fuese necesaria, incluso aunque esta estuviera reñida con la ley. 

Martin Shaw especulaba con que a la serie le iría mal y él buscaría otra cosa, pero al ser un éxito tuvo que continuar en ella, además tenía contrato firmado por cinco años. Lewis Collins, también era difícil, era muy crítico de los guiones, especialmente por cómo se mostraba a Bodie, su personaje, especialmente en el capítulo controversial llamado klansmen, en el cual se tocó el tema del racismo en Inglaterra y fue censurado en su país de origen, pero emitido en el resto del mundo.

Otra cosa que reparábamos quienes veíamos en aquellos años la serie, era en los automóviles, un convenio con Ford, pondría a Bodie al mando de un Ford capri, a Doyle al volante de un Ford escort rs2000 y a Cowley siendo trasladado en un Ford granada mkII. Los tres autos tuvieron un importante incremento de ventas en aquel momento, otro indicio de lo hondo que la serie había calado en el público en 1978.

Pero si bien todo era éxito, hacia finales de la segunda temporada, Shaw otra vez quiso renunciar, esta vez haciendo declaraciones a la prensa en algunas entrevistas y Collins había cansado a sus empleadores. Por lastimarse una pierna en un salto en paracaídas que hizo por diversión, algo que por contrato tenía prohibido, se tuvo que suspender las filmaciones de la serie luego del décimo capitulo, decidiendo los productores cancelar lo que quedaba para el resto del año y comenzar al siguiente con una tercera temporada, lo cual les resulto en un perjuicio económico a los productores.

En 1979, la inflación que había en Gran Bretaña, hizo que diversos conflictos gremiales terminaran en una huelga, por tal motivo la tercera temporada de la serie se redujo a solo ocho capítulos, los cuales serían emitidos en 1980, finalmente se pudieron rodar trece.

Brian Clemens ante el éxito de la serie comenzó a escribir el guion para hacer la película, al hacerles la propuesta, tanto Lewis Collins como Gordon Jackson aceptaron de inmediato, pero Martin Shaw en cambio, puso como condición para participar, tener un control total sobre el guion.

Clemens contaría años después, “Martin quería aprobar el todo y no había manera que yo le diera a un actor esa potestad”. Por tal motivo lamentablemente, la versión cinematográfica quedaría en la nada y luego Shaw se quejaría de la producción en entrevistas, llevando las relaciones entre el actor y la producción a un punto sin retorno. Pero el dinero pudo más y se realizó la cuarta temporada, siendo quizás la menos recordada, porque Bodie y Doyle tenían misiones por separado. Los guiones serian menos interesantes, los actores creían que esto era una venganza de Clemens hacia ellos, aunque este siempre lo desmintió.

En 1982 se realizaría la quinta y última temporada de los profesionales, si bien era un caos interno esta temporada tuvo un repunte en incluso en ella se encuentra uno de los mejores capítulos de la historia, “discovered in a graveyard”, donde a Doyle le disparan a quemarropa un tiro en el pecho y otro en la espalda, quedando en coma, mientras nos muestran después como la mente del personaje emprende un delirante viaje de muerte en un ambiente surrealista. Entretanto, Doyle se pregunta si quiere seguir siendo agente o prefiere morir. Este guion es más que interesante porque dicha paradoja era prácticamente una autocrítica hacia el programa tanto de sus actores como por parte de sus creadores.

Lewis Collins y Martin Shaw, tenian contratos hasta el 1 de mayo de 1981, con ellos quedaría sellado el fin de la serie, incluso la cadena de televisión tuvo la idea de que en el último capítulo Bodie y Doyle cayeran en cumplimiento del deber, pero Brian Clemens se opuso terminantemente, con la más que acertada opinión que a ningún televidente le gustaría ver a sus ídolos morir, por más heroica que fuera la razón. 

Además, se tenía la fantasía de seguir un año más con George Cowley al mando de un nuevo equipo, no pasó, aunque pasaría muchos años más tarde con “CI5 the new profesionals”, con Edward Woodward como el jefe en lugar de Jackson, quien falleció en 1990. 

Durante muchos años al menos en nuestro país no se supo casi nada ni de Collins quien quedó relegado a personajes poco trascendentes, hasta que falleció a causa de un cáncer el 27 de noviembre de 2013.

En el caso de Shaw no lograría ni por asomo concretar la ambiciosa carrera que soñó, pero tendría un segundo momento de gloria al interpretar al inspector George Gently en la serie de la BBC, emitida entre 2007 y 2017. 

Sin dudas, “los profesionales” marcó una época, y a diferencia de muchas otras de su tiempo, al volver sobre ella y ver sus capítulos, realmente uno se vuelve a dejar llevar por su trama, como quien ve una fotografía de un ser querido que ya no está entre nosotros y al verla te trae buenos recuerdos.

Quizás sea que es algo realmente bueno o a lo mejor simple nostalgia, quien sabe, lo cierto es que sus escenas increíblemente realistas, sus persecuciones a toda velocidad y el entramado político de fondo, todo regado con whisky logran lo que todo programa o serie anhela desde que comienza, ser un auténtico clásico.