El caso de Shamira Yoselí, la viuda negra que atacó a un turista alemán: tiene 18 años

Fue capturada por la Policía de la Ciudad en la Villa 21-24. Los otros casos de un delito que no para y la zona caliente en CABA.

Policiales24/12/2024Alejandra LarreaAlejandra Larrea
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La acusada tras su detención.

A principios de este mes, la Policía de la Ciudad detuvo a Shamira Yoselí M. en el apartamento que comparte con su familia en los edificios que construyó el Gobierno de la Ciudad en la Villa 21-24 de Barracas, cerca de la Villa Zavaleta. Le hallaron cuatro balas calibre .380, su teléfono Samsung y un gotero que se podrá analizar en busca de sustancias.

El delito del que la acusan, bajo la responsabilidad del juez Martín Peluso, es robo. Se trata de un clásico ataque de viuda negra que ocurrió en un departamento de alquiler temporal en la calle Humahuaca, en la zona del Abasto. Esta vez, la víctima fue un turista alemán de 45 años.

Lo que sorprende esta vez es la edad de la persona acusada. El ataque sucedió el 20 de julio pasado. Shamira Yoselí había cumplido 18 años 38 días antes, lo que significa que es casi treinta años más joven que su víctima.

La alarma se activó después de que la víctima llamara al 911. El personal de la Comisaría 5A registró su relato. Dijo que conoció a una chica por la app de citas Tinder. Después de un match rápido, y confiado en la situación, sin notar nada extraño en tener una cita con una adolescente, la invitó a su departamento a tomar algo.

370e121c-fa5c-400c-be08-a80d15f0df4dMataron a un policía de un tiro en la cabeza en San Martín

Después del segundo o tercer trago, el alemán se desmayó. Al despertar, se dio cuenta de que la chica ya no estaba. No estaban ni su teléfono ni su laptop.

Después de varias investigaciones y trabajos en el campo, Shamira fue identificada y finalmente arrestada como sospechosa por la policía de Buenos Aires el lunes 9 de este mes.

El resurgimiento de las viudas negras
En los últimos dos años, las mujeres de la Villa 21-24 y la Villa Zavaleta acusadas de drogar y robar a hombres veinte años mayores, después de conocerlos en aplicaciones de citas, han sido un tema común en las comisarías de Buenos Aires.

En junio pasado, el Departamento de Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la PFA ingresó a la Zavaleta después de una investigación dirigida por el juez Alejandro Ferro y el fiscal Marcelo Retes. Detuvieron a Kiara G., de 18 años, y a su amiga Eunice L., de 22, originaria de Paraguay, por robarle a un hombre en Belgrano R el 5 de diciembre pasado.

La víctima le dijo a su hijo que había salido la noche anterior con una chica joven que conoció por Tinder. Recordó su apodo, “Nicole21”. Poco después de que el SAME lo atendiera y logró ponerse de pie, se dio cuenta de que faltaban varias cosas: tres computadoras portátiles, doce mil dólares, trescientos mil pesos argentinos, un reloj y los guantes de Harley Davidson para su moto.

Además, tenía un pequeño arsenal: ocho pistolas de distintos calibres y 750 balas.

El nuevo crecimiento de las viudas negras
En los últimos dos años, mujeres, especialmente de la Villa 21-24 y la Villa Zavaleta, han sido acusadas de drogar y robar a hombres veinte años mayores después de conocerlos en aplicaciones de citas. Esto se ha vuelto común en las comisarías de la ciudad.

En junio pasado, el Departamento de Inteligencia Contra el Crimen Organizado de la PFA ingresó a la Zavaleta después de una investigación dirigida por el juez Alejandro Ferro y el fiscal Marcelo Retes. Kiara G., de 18 años, y su amiga Eunice L., de 22, que nació en Paraguay, fueron detenidas. Se les acusa de robar a un hombre en Belgrano R el 5 de diciembre.

La víctima le dijo a su hijo que había tenido una cita la noche anterior con una chica joven que había conocido por Tinder. Recordó su apodo, “Nicole21”. Poco después de que el SAME lo visitó y pudo levantarse, se dio cuenta de que le faltaban varias cosas: tres computadoras portátiles, doce mil dólares, 300 mil pesos argentinos, un reloj y los guantes Harley Davidson para su moto.

Además, todo su pequeño armamento: ocho pistolas de diferentes tamaños y 750 balas.

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