GUILLERMO VILAS y JOSE LUIS CLERC, LOS FUNDADORES DEL TENIS ARGENTINO.

Quienes tenemos más de 50 años hemos crecido con los partidos y la rivalidad de estos dos monstruos del tenis nacional, entre ambos ganaron 87 títulos de ATP y a pesar de su rivalidad y antipatía, llevarían a nuestro país a la primera final de copa Davis en 1981, la cual sería derrota por 3 a 1 ante Estados Unidos. 

Muchos se preguntaban entonces, e incluso ahora, porque era la mala relación entre los dos mejores exponentes de nuestro tenis y el propio José Luis Clerc en un programa radial dijo que fue muy boludo en su enojo con Vilas y además contó que su hija menor tuvo mucho que ver en la recomposición del vínculo. 

Clerc quien tuvo malos momentos por sus problemas con el trastorno de ansiedad, dijo que hasta estuvo cerca del suicidio, hasta que en Estados Unidos conoció a un psiquiatra, quien le hizo ver que hay otra vida. 

Refiriéndose a Vilas dijo, “a Guillermo lo extraño mucho, lo quiero, lo adoro, estuve muy peleado con él, me amigué por mi hija Sofi, ella es hipoacúsica y él me ayudó, a mí me sorprendió el gesto, ya que estábamos muy peleados, no lo quería ni ver, los celos de la competencia, nuestros entrenadores. Lo llamé un día para decirle que lo necesitaba para un evento y me dice ¡voy!         Yo me quedé helado, que pena pelearse por boludo, lo digo ahora que está mal, porque quisiera estar al lado de él, me emociona porque Guillermo Vilas es parte de mi vida”. 

Clerc siente que perdió el tiempo con Vilas al estar distanciado, declaró, “es el hermano que nunca tuve o tuve y se fue muy rápido, lo amo, lo quiero, cuantas estupideces que uno hace cuando está metido en un mundo competitivo como el tenis”.

En cuanto a Guillermo Vilas el 6 de marzo de 1983, lograría una de sus victorias más resonantes aplastando a ni más ni menos que John McEnroe por 6-4, 6-0 y 6-1. Vilas recordaba, “no daba para grandes festejos, Mac tenía suficiente con el score y la derrota, preferí no demostrar nada, pero jugué a muerte porque quería dejar la mejor imagen en mi país en mi último partido por la copa Davis, aunque fui al año siguiente a Alemania para no dejar al equipo en el descenso, fue uno de los mejores tres partidos de mi vida”. 

Jose Luis Clerc en ese mismo año vencería también a John McEnroe y recuerda, “el pobre John estaba colorado como un tomate, porque no estaba habituado a jugar con tanto sol y calor, obviamente estaba acostumbrado a las grandes presiones, por eso fue el número 1 del mundo, pero el estadio ese fin de semana fue una caldera, hasta el día de hoy cuando nos cruzamos me dice no me hables de la copa Davis”. 

Gustavo Tiberti recuerda de esa época, “era un evento brillante, jugar de local contra Estados Unidos, con la presencia de McEnroe, batata Clerc era top ten y un gran tenista, pero Guillermo era un rockstar descomunal, en ese momento ya estaba Maradona como ídolo  pero Vilas había aparecido antes y durante años fue la figura deportiva indiscutida de nuestro país, compartí muchas cosas con el tanto aquí como en el mundo donde era como una vedette y a él le gustaba ese juego porque se sentía una estrella” . 

Pero una cosa extraña de toda esta recordada época dorada era que hasta 1981 ni Vilas ni Clerc se habían destacado por actuaciones trascendentes en los torneos de Grand Slam, para colmo en esa época estaban monstruos de la talla de Bjon Norg, Jimmy Connors e ivan Lendi.

Sin embargo, antes de la Davis había una cosa segura y era que Vilas y Clerc no se hablaban, cuestión de egos, por competencia o el hecho que muchos comenzaran a compararlos hizo que el distanciamiento fuera duradero.

Pero cuando jugaban juntos eso no se notaba, “nosotros estábamos peleados, nos teníamos bronca, no nos hablábamos ni adentro ni afuera de la cancha, pero había algo que nos unía, jugábamos por Argentina”

Guillermo Vilas sin dudas ha sido uno de los mejores tenistas de la historia y sin dudas el mejor de nuestro país y lamentablemente no le reconocieron el número 1 del año 1977, tal es así que tiene 3 marcas logradas ese año que aún no fueron superadas, la mayor cantidad de triunfos consecutivos en todas las superficies, la mayor cantidad de partidos ganados en un mismo año y la mayor cantidad de títulos conquistados en una temporada.

El periodista Eduardo Puppo, hizo una investigación que demuestra que Vilas fue número 1 dos veces, el 22 de septiembre de 1975 y entre el 5 y el 18 de enero de 1976, pero en ese entonces el ranking no se publicaba de manera semanal y las semanas en las que se hizo público no fueron coincidentes con las que Vilas estuvo como el uno. 

Sin dudas que Vilas fue uno de los más grandes de la historia y batata Clerc también lo fue. Lo cierto es que los dos nos dieron espectáculos inolvidables y fueron sin dudas dos enormes embajadores internacionales del deporte argentino.