El riesgo país continúa en descenso y ya se ha situado como el más bajo en cuatro años.

A pesar del feriado en Argentina, tanto los bonos como las acciones continúan en ascenso a nivel global. Con esto, el riesgo país se reduce un poco más y alcanza los 1.108 puntos básicos, marcando un nuevo hito en la era Milei y la disminución más significativa en cuatro años.

Este progreso ocurre en medio de un incremento en los bonos, que en Nueva York se recuperan entre un 0,5% y un 1%, mientras que las acciones se elevan hasta un 2,5%, lideradas por Mercado Libre.

Hasta el momento, el mejor resultado de la administración actual de este indicador de JP Morgan, que evalúa el sobrecosto de la deuda de Argentina en comparación con los bonos del Tesoro de Estados Unidos, se alcanzó el miércoles de esta semana, alcanzando 1.121 puntos. Esto dejó en evidencia el nivel previo de 1.148 puntos de abril.

Durante octubre, el riesgo país se redujo en un 14% y se redujo en un 42% a lo largo del año.

La disminución de hoy supera la cifra del 11 de septiembre de 2020 y se encuentra a un paso de ser la más baja en cinco años. El 10 de septiembre de 2020, fecha en la que Martín Guzmán efectuó la transferencia de la deuda, la sustitución de los bonos antiguos por los nuevos causó que en pocas horas el riesgo país se elevara de 2.147 puntos a 1.083. Sin embargo, ese mismo día cerró en 1.104, para ascender a 1.108 el día posterior.

En 2019, alcanzó los 629 puntos durante la primera mitad del año y ascendió a 2.546 después del triunfo de Alberto Fernández. La pandemia de 2020 provocó que en marzo, cuando el mundo estaba en convulsión debido al bloqueo provocado por el Covid en el comercio mundial, el indicador ascendiera a 4.519 puntos. Con la reactivación de las economías, el riesgo país disminuyó en todos los países periféricos, y lo mismo sucedió con Argentina.

Finalmente, el canje de deuda realizado por Martín Guzmán y con una alta participación, llevó a que disminuya a la zona de los 1.100 puntos. Sin embargo, esa tranquilidad duró poco y en solo algunas semanas ascendió a 1.500 puntos, alcanzando los 3.000 después de que Guzmán dejó el ministerio, en julio de 2022.

Con la dirección de Sergio Massa en el Palacio de Hacienda, el riesgo se situó en promedio de 2.500 puntos. Cuando inició la administración de Luis Caputo, tenía un marcador de 1.935 puntos.

El riesgo país muestra el grado de escepticismo de los inversores respecto a las probabilidades de que se cumpla el pago de la deuda. A niveles elevados, aumenta la incertidumbre y disminuyen las oportunidades de que el país pueda asumir una nueva deuda. Con un riesgo país como el presente, Argentina tendría que endeudarse a un ritmo no inferior al 16% en dólares, un monto impagable.

El historial de incumplidores en Argentina provoca que los acreedores soliciten tasas considerablemente más elevadas a las que los vecinos están pagando. La calificación del país en 1.108 puntos quintuplica la de Uruguay y cuadriplica la de Brasil. Para alcanzar niveles aceptables, se debería mantenerse por debajo de los 700 puntos, un hito que se logró, con ascensos y descensos entre 2006 y 2019.