El Gobierno eliminará las regulaciones de la VTV y permitirá que haya controles en talleres.

Las reformas a la Ley Nacional de Tránsito permitirán que la Verificación Técnica Vehicular se realice en lugares privados. ¿Qué requisitos deben cumplir y qué maquinaria necesitan?

Actualidad28 de diciembre de 2024Alejandro CabreraAlejandro Cabrera
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VTV

Uno de los objetivos del Gobierno para el próximo año es reducir las regulaciones sobre el control técnico de los vehículos en Argentina. Se quiere permitir que lo que se llama Revisación Técnica Obligatoria (RTO), y que en CABA y la Provincia de Buenos Aires se conoce como Verificación Técnica Vehicular (VTV), se pueda hacer en lugares privados como concesionarios oficiales y talleres autorizados.

Esto no es algo nuevo. Está escrito en la Ley Nacional de Tránsito, que ha estado vigente desde 1995. Sin embargo, nunca se ha puesto en práctica, lo que ha permitido la creación solo de las plantas actuales de VTV y RTO. Por eso, en la Ley Bases que se envió al Congreso en diciembre de 2023 y se aprobó a finales de junio de 2024, se destaca la importancia de formalizar esta situación de apertura, al menos creando el marco legal para hacerlo posible.

"Las provincias deben aceptar este cambio." Se busca que la verificación técnica se realice en un concesionario, por eso lo vamos a incluir en la Ley de Tránsito. “Pero las provincias tienen que aceptar la medida para que se pueda aplicar en cada lugar", dijo Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, hace algunos días en una entrevista por televisión.

Sin embargo, además de la decisión del Gobierno y la posible aceptación de las provincias para que un concesionario oficial o un taller mecánico autorizado realice una VTV, deben cumplirse otras condiciones. Una es responsabilidad del Estado, pero queda solo en manos de los individuos.

La primera se refiere a crear un "ecosistema nacional" que ofrezca el contexto necesario para que los puntos homologados realicen estas revisiones técnicas. En este momento, las plantas de VTV y RTO solo revisan los vehículos que están en su área. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hay 7 plantas, mientras que en la provincia de Buenos Aires hay 30. No hay una cifra oficial porque son organismos provinciales o municipales, pero se calcula que hay alrededor de 400 plantas de verificación en todo el país.

La apertura a concesionarios oficiales y talleres particulares requiere informatizar el sistema. Esto se debe a que, además de tener más puntos de control para los vehículos, deberán estar conectados para atender vehículos de cualquier parte del país.


“La única posibilidad de hacerlo es con equipos conectados a una red, es decir, convirtiendo las plantas de verificación a la tecnología 4.0, con soluciones enfocadas en la interconectividad, la automatización y los datos en tiempo real. Hay que incorporar inteligencia artificial e Internet de las cosas (IOT) para poder lograr esa integración, no sólo por el funcionamiento en sí mismo, sino también para su control de gestión”,  dijo Constantino Abella Roigt, presidente de CVA (Control Vehicular Argentino). CVA es la empresa certificada por el INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial) que fabricó el 50% del equipo de las plantas de VTV que operan en Argentina y que actualiza el software del 80% del mercado.

“En los países más avanzados del mundo, las plantas de VTV reemplazan su equipamiento cada 5 años por máquinas nuevas. Esos equipos que dejar suelen ser comprados por los talleres más chicos, con menos capacidad de inversiones, y lo que se hace es una actualización del software, que es mucho más accesible”, comentó Abella Roigt.


Además, si el gobierno propone reemplazar la oblea o sticker que se pone en el lado derecho del parabrisas como prueba de la verificación de los vehículos, por un documento digital que se muestre en una aplicación como Mi Argentina, esta red digital se convierte en una solución adicional para el sistema nacional.

Las dos cosas más que se necesitan son el equipo y la formación de las personas que lo usarán. Contrario a lo que se podría pensar, un taller no necesita tener un edificio muy complicado para realizar una VTV para autos particulares. No es necesario hacer una fosa, aunque sería la mejor manera de revisar los juegos de suspensión y dirección mientras el auto tiene su peso apoyado en las cuatro ruedas.

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Abella Roigt, un proveedor de equipos nacionales que también vende a 27 países, estima que la inversión en el equipo técnico completo para que un taller pueda realizar una VTV es de unos USD 100.000.

La última condición es contar con personal capacitado para usar estos equipos, así como asegurarse de que cada uno esté calibrado correctamente para que la medición sea precisa. A menos que se cambie el texto de la Ley Nacional de Tránsito cuando el gobierno anuncie las reformas que quiere hacer, la ley misma dice esto en el artículo 35.


Lo que establece la Ley de Tránsito acerca de la VTV.

El artículo 34 indica, entre otras cosas, que “las piezas y sistemas que se van a revisar, la frecuencia de las revisiones, el método a usar, el criterio para evaluar los resultados y el lugar donde se hagan, son fijados por la normativa y deben ser cumplidos por la autoridad competente." Esto permitirá que la verificación sea hecha por las concesionarias oficiales de los fabricantes o importadores, o por talleres autorizados para este propósito, asegurando un control estricto.

El artículo 35 dice que "Los talleres mecánicos, ya sean privados o públicos, que reparen vehículos en lo relacionado con la seguridad y la contaminación, deben ser autorizados por la autoridad local, que llevará un registro de ellos y sus características".


El texto también aclara qué capacitación y responsabilidad deben tener las personas que realizan las revisiones técnicas. Indica que “cada taller debe tener: la idoneidad y demás características reglamentarias, un director técnico que sea civil y penalmente responsable de las reparaciones, un libro rubricado con los datos de los vehículos y los arreglos realizados, en el que se anotará los que sean retirados sin terminar”.

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