El Mercosur y la Unión Europea sellaron un acuerdo de libre comercio

Los líderes del Mercosur y la Unión Europea informaron el viernes que lograron un acuerdo de comercio sin restricciones luego de 25 años de difíciles conversaciones. Los dos grupos que comercian juntos tendrán la oportunidad de llegar a más de 700 millones de personas.

La visita sorpresa de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, a Montevideo el jueves indicaba que ya se había acordado algo, y esto se confirmó oficialmente el viernes por la mañana. "Es un momento muy importante en la historia", dijo Von der Leyen en una conferencia de prensa con Luis Lacalle Pou, Javier Milei, Lula da Silva de Brasil y Santiago Peña de Paraguay. En unas palabras rápidas a los medios, Milei expresó: "Cualquier cosa que ayude a ser más flexible, es bienvenida".

El presidente de Paraguay, Santiago Peña, fue el primero en informar a Clarín el viernes temprano que había un acuerdo. Su gobierno había estado haciendo algunas pequeñas objeciones al texto que finalmente se acordaron en las negociaciones.

"Los Estados Partes signatarios del Mercosur-la República de Argentina, la República Federativa del Brasil, la República del Paraguay y la República Oriental del Uruguay- y la Comisión Europea han anunciado, en la 65ª Reunión de la Cumbre del Mercosur Montevideo, 6 de diciembre), la conclusión de las negociaciones de un Acuerdo de Asociación entre las dos regiones, después de más de dos décadas de negociaciones".

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En solo tres párrafos, se dice que "debido al avance logrado desde 2023, el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea está listo para ser revisado legalmente y traducido". Ambos grupos planean realizar estas actividades en los próximos meses, pensando en firmar el acuerdo en el futuro.

Los presidentes no se llevaban bien, principalmente debido a las tensiones entre Lula y Milei. Lacalle Pou fue el primero en llegar al edificio del grupo, que está frente al río que rodea la capital de ese país. De manera interesante, Milei, quien llegó en un avión oficial con su hermana Karina Milei, que es secretaria general de la Presidencia, tenía que ser el primero en entrar al antiguo Edificio, pero al final fue el último en hacerlo. Se generaron muchas suposiciones al respecto, como la idea de que él y Lula da Silva evitaron quedarse solos.

El discurso de Lacalle Pou en la última reunión del Mercosur tuvo un tono de despedida, ya que dejará la presidencia al recién elegido Yamandú Orsi.

Y como si fuera un mensaje secreto a Lula da Silva y Milei, que nunca hablaron a solas porque se llevan muy mal, el presidente de Uruguay dijo que aunque hay diferencias en el grupo, lo fundamental es mantenerse unidos. Poco después, Von der Leyen, al dirigirse a los europeos, mencionó que el acuerdo era beneficioso para ambas partes. Y esto tuvo efectos no solo en la economía y el comercio, sino también en la política y las inversiones.

En Europa, este acuerdo es muy importante porque los agricultores franceses se oponen a hacer un acuerdo con una región que es muy competitiva en la producción de materias primas. Emmanuel Macron declaró que no lo firmaría. Italia también se está oponiendo y los polacos e irlandeses podrían unirse. Pero hoy solo Francia está aislada y no puede impedirlo en esta ocasión.

Al terminar la reunión, los cinco se sacaron una foto juntos y luego fueron a la sala de prensa en la sede del Mercosur. Y la reunión comenzó.

Al expresarse, Milei dijo que el Mercosur es como una cárcel. Pero a pesar de lo que algunos de sus colaboradores habían dicho sobre salirse del grupo si no les permitían hacer acuerdos con otros países, el presidente siguió el plan acordado por su canciller Gerardo Werthein el jueves. Hoy en día, el Mercosur necesita la aprobación del grupo para firmar acuerdos de libre comercio con otros países. El reclamo argentino ahora lo hace Milei, antes lo hacía Lacalle Pou.

El jueves, Werthein y el ministro de Economía, Luis Caputo, junto con el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, discutieron este importante acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. En los últimos dos años, se llevaron a cabo siete reuniones para intentar restablecer el acuerdo del 2019, que fue muy importante. Sin embargo, estas negociaciones fracasaron principalmente debido a la influencia de grupos proteccionistas franceses, y también por ciertas condiciones que no fueron bien recibidas en Brasil y Argentina.

"Unirnos en un grupo no solo no nos ayudó a crecer, sino que nos ha causado daño." Mientras países como Chile y Perú se relacionaron con otros países y firmaron acuerdos comerciales con los principales actores del comercio mundial, nosotros nos quedamos aislados, tardando más de 20 años en concretar un acuerdo que ahora celebramos, aunque todavía no se ha hecho realidad. No es sorprendente que la economía de nuestros vecinos haya crecido más que la nuestra, ya que tienen acuerdos comerciales con más de 20 países, mientras que nosotros solo tenemos tratados con países de Sudamérica, Egipto e Israel", comentó el presidente Milei de manera tranquila el viernes pasado.

El presidente señaló que el Arancel Externo Común es un problema y animó a sus colegas a encontrar una solución que beneficie a todos y mejore nuestras ventas comerciales.

Lula expresó que esta cumbre era importante y quería destacar las diferencias con la cumbre del año 2019, la cual fue firmada por su antecesor y rival Jair Bolsonaro. Lula se fue de la reunión antes de que terminara y antes de que Milei se convirtiera oficialmente en el presidente del grupo, que solía ser un momento feliz. Las reuniones del Mercosur son cada vez más pequeñas en todos los aspectos.

"El Acuerdo que finalizamos hoy es muy diferente del anunciado en 2019", dijo. Las condiciones que heredamos eran inaceptables. Era necesario incorporar al Acuerdo temas de alta relevancia para el Mercosur. Logramos preservar nuestros intereses en las compras gubernamentales, lo que nos permitirá implementar políticas públicas en áreas como salud, agricultura familiar y ciencia y tecnología", dijo y remarcó que se había había ampliado el calendario de apertura de nuestro mercado automotriz, salvaguardando la capacidad de promoción del sector industrial", completó.

Por su parte Lacalle Pou en su discurso mostró parte de la transición uruguay ya que destacó estar acompañado por el presidente electo, Yamandú Orsi y le pasó la batuta y deseó que "le vaya mucho mejor que a nostoros".
 
Al mismo tiempo en tono de queja tuvo mensajes hacia Alberto Fernández porque dijo que él había sido quién empezó a pedir la flexibilización del bloque y que le dejaran firmar un acuerdo con China. Y tuvo otro mensaje para Milei a quien le pasó en esta cumbre la presidencia del bloque. "No se contradice la existencia del Mercosur con la flexibilidad del bloque", dijo y recordó que él abogaba antes la "libertad" como valor del mismo. Pero pidió abogar por esa flexibilidad contemplando el "buen trato", los buenos "modos".

El Mercado Común del Sur tiene como estados miembros a la Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela. Este último está suspendido desde 2016 por la cláusula democrática del bloque. Bolivia es ya estado miembro en proceso de adhesión. Y en la cumbre también habló el presidente de Bolivia Luis Arce. 
Los asociados, que participan en las reuniones del Mercosur sin derecho a voto son: Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Guyana, Surinam. Mientras tanto, Panamá está en proceso de ser país asociado, de ahí que en esta cumbre participara el presidente José Raúl Mulino. Y Milei pidió que se exploren acuerdos comerciales con Nayib Bukele, de El Salvador, según dijo el gobierno de Uruguay, aquí.