Más problemas para el dictador Maduro

Luis Almagro, el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), declaró que solicitará a la Corte Penal Internacional (CPI) que ordene el arresto del presidente de Venezuela, a quien acusó de haber llevado a cabo un "baño de sangre" contra los manifestantes después de las elecciones del domingo.

Almagro dijo durante una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA en Washington que "es hora de la Justicia y nosotros vamos a solicitar la imputación de cargos con orden de aprehensión", en la que instó a los Estados miembros a unirse a la petición.

El secretario general expresó que es hora de imputar a los más responsables, incluyendo a Maduro, debido a la investigación que la Fiscalía de la CPI ha llevado a cabo sobre los presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela desde 2014.

Almagro afirma que el líder de Venezuela está a cargo de ordenar la ejecución de la opresión contra la población del país.

El político uruguayo expresó que "Maduro ha anunciado un baño de sangre y lo está cumpliendo", en referencia a la muerte de al menos 16 manifestantes en las protestas en contra del Gobierno venezolano después de las elecciones del domingo.

Durante un acto electoral previo a las elecciones, Maduro advirtió que en caso de su derrota, Venezuela podría enfrentar una guerra civil y un baño de sangre.

Almagro expresó: "Me impresionó cuando lo dijo, pero me impresiona mucho más cuando lo está haciendo".

Desde que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció la victoria de Maduro en las elecciones del pasado domingo, la crisis en Venezuela se ha agravado. La oposición y una gran parte de la comunidad internacional exigen la revisión de las actas de votación para confirmar los resultados.

Debido a la abstención o ausencia de países como Brasil, Colombia y México, la OEA no logró la mayoría necesaria para aprobar una resolución que requería la verificación de los resultados en Venezuela este miércoles.

El martes, ese mismo organismo emitió un comunicado contundente de desaprobación en relación al manejo de las elecciones presidenciales en Venezuela por parte del gobierno chavista. La nota afirma que la represión más vergonzosa es evitar que el pueblo encuentre soluciones a través de las elecciones.

El informe del Departamento de Cooperación y Observación Electoral (DECO) de la OEA sobre el proceso electoral presidencial en Venezuela sirvió como base para el texto.

Cada institución en Venezuela tenía la responsabilidad de garantizar la libertad, la justicia y la transparencia en el proceso electoral. La OEA exigió que se garantizara la máxima libertad política para que el pueblo pudiera expresarse en las urnas y proteger los derechos de los ciudadanos a ser elegidos.