Se teme que haya más de 150 muertos en una matanza en Sudán en la que al menos 35 niños fueron asesinados

Se presume que las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), un grupo paramilitar que combate al ejército, hayan causado la muerte de al menos 150 personas, incluyendo 35 niños, en un pueblo del centro de Sudán.

Lleva más de un año que los grupos armados oponentes compiten por el control del país.

Aunque las RSF no han hecho comentarios sobre las acusaciones, se jactaron de haber atacado dos posiciones del ejército el jueves.

Después de la redada del miércoles, las imágenes que circularon por las redes sociales mostraban decenas de cadáveres envueltos en sudarios blancos preparados para ser enterrados en Wad al-Nourah, en el estado de Gezira.

El Comité de Resistencia de Madani afirmó que actualmente espera la confirmación del número de fallecidos y heridos.

Según Unicef, en el ataque murieron 35 niños y más de 20 resultaron heridos. Catherine Russell, directora ejecutiva de la agencia, calificó las escenas reales de devastadoras.

Russell expresó: "Este es otro triste recordatorio de cómo los niños de Sudán están pagando el precio de la brutal violencia".

Miles de niños han fallecido o sufrido heridas, más de cinco millones han sido obligados a abandonar sus hogares y otros han sido reclutados, secuestrados y violados en el último año, según Russell.

Es poco claro cuáles fueron las circunstancias que llevaron a los asesinatos del miércoles; se dice que los combatientes de las RSF atacaron la aldea dos veces ese día.

A la BBC, Hafiz Mohamad, miembro del conocido grupo de derechos humanos Justice Africa Sudan, informó que aún existen numerosas personas desaparecidas y que resultaba complicado identificar a todos los fallecidos debido a que los miembros de las RSF continúan saqueando en la región.

El gobierno militar de Sudán ha pedido a la comunidad internacional que condene el ataque en Wad al-Nourah.

David Cameron, el ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido, expresó su condena al "ataque a personas inocentes" y responsabilizó a las RSF en un mensaje emitido en X.

Cameron escribió que las RSF debían poner fin a estos ataques. El mundo está observando. Los responsables deberán responder.

Dos individuos que buscan terminar con su nación.

En diciembre, las RSF tomaron el control del estado de Gezira, al sur de la capital, Jartum, y han sido acusadas de cometer numerosos abusos contra la población civil, acusación que rechazan.

En El Fasher, una ciudad al oeste de Darfur, continúan las intensas batallas entre las RSF y el ejército.

Desde el inicio del conflicto en abril de 2023, se calculan más de 15.000 muertes en todo el país.

La guerra, que comenzó cuando los dos generales que dirigían el ejército y las RSF se enemistaron, no ha tenido fin después de varias rondas de conversaciones de paz.

Según las agencias de la ONU, los conflictos han provocado la mayor crisis de desplazados del mundo, lo que ha llevado a millones de personas a enfrentar una situación de hambre.

Esta semana, el Subsecretario General de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, declaró que hasta cinco millones de personas estaban en alto riesgo de sufrir una hambruna.

En su opinión, nunca antes se había registrado un número tan alto de personas en peligro de sufrir una hambruna, y afirmó que este conflicto era posible de evitar.

Griffiths describió el lugar como un lugar donde dos hombres decidieron resolver sus diferencias luchando y acabando con su país.