NO TAN DISTINTOS || CAPITULO 2 || Argentina según quién quiera

En pocas horas estaremos entrando en el 25 de Mayo. El comienzo de nuestra historia. Una historia que cambia mucho según quién la cuente.

Análisis y Opinión24/05/2024Alejandro CabreraAlejandro Cabrera
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El Mitrismo y Revisionismo fueron las dos grandes vertientes históricas por las cuales se forjó la historia argentina. O por lo menos las palabras que escribieron la historia. Así podemos ver a Juan Manuel de Rosas como el primer tirano o como el primer patriota en tener sentido de Justicia Social. Podemos pensar a Roca como un genocida o como el forjador del estado moderno. Yrigoyen y Perón, como los creadores del populismo o de la argentina fuerte y pujante. 

Más acá podemos ver el revisionismo sobre el kirchnerismo multitratado por la litetarura reciente. Y como todo entra en esta historia, los 90 y los 70 están siendo revisados de vuelta y cambiando el sentido de hegemonía ideológica que tenían. Es decir, ahora la dictadura no es tan mala y hay gente que se anima a decir que Menem fue el mejor presidente de la historia. 

EL TURBULENTO SIGLO 21

Este capitulo será el único meramente de opinión. Es decir, los datos duros que entran para fortalecer la argumentación vendrán en las próxmias entregas. En este momento son sentimientos de un jóven hecho intelectualmente durante los 24 años del siglo 21. 

El año 2000 nos encontraba en una etapa muy rara. Veniamos del que ahora muchos reinvindican. Pero en ese momento la llegada de la Alianza al poder fue muy parecida a la llegada de Milei. Menem era mala palabra. La convertibilidad una bomba que nadie se atrevía a tocar. El desempleo y la pobreza crecían de manera galopante. Las reservas se apagaban y el peronismo, como era de esperar, cagó al presidente en la Alianza. 

El peronismo era representado por Chacho Álvarez que era parte del Frepaso en aquel momento, pero era peronista de alma. Chacho dejó su cargo de vicepresidente denunciando coimas en el congreso. Y el gobierno ahogado en una crisis tremenda, resultó por llamar a Cavallo, con el aval y la ayuda de un chacho que no estaba en la luz, pero estaba en las sombras.

Cavallo tenía asegurada la llegada de plata desde el norte. PERO CAYERON LAS TORRES GEMELAS y todo cambió. Argentina pasó a segundo plano. No vinieron los dólares, estallido social, cinco presidentes en una semana, y el "Zabeca de Banfield" al poder con la ayuda del "Padre de la democracia" y padre del kIrchnerismo, Raúl Alfonsín. 

Duhalde devaluó, hizo la pesificación asimétrica, llevó la pobreza a niveles que nunca se vieron, licuó y licuó. Limpió la economía. Nadie dijo nada porque era peronista de Perón. No tan distinto a lo que Milei está haciendo, ojo.  Distinto, pero no tan distinto. Ah, otra cosa, allí comenzaron a surgir dos cuestiones que van de la mano pero a la vez por separado. Los movimientos sociales y los planes sociales. 

A Anibal y Eduardo se les fue la mano, mataron a dos piqueteros y adelantaron las elecciones. Y llegó Néstor. 

Con una economía saneada, la mejor situación internacional capaz de la historia para comerciar y una alianza latinoamericana para gobernar y para, bueno, hacer de las suyas. 

Cinco años de una amor inconmensurable hasta que llegó la pelea con el campo por las retenciones móviles. Y parecía que caía todo, pero no, falleció Néstor. Y Cristina fue reelecta y trató de ir por todo. Pero entre Macri y Ventajita la frenaron cuatro años.

Macri quiso pero no pudo. Y cristina no alcanzaba, entonces llamaron al felpudo. Y ahí la combinación perfecta. El peor gobierno de la historia, la corrupción por todos lados, el hartazgo de la gente y un catalizador. Javier Milei.

Jamoncito en cinco meses nos dio para escribir lo mismo que en estos veinte años. Como en 1810 estamos esperanzados y  a su vez, sufriendo directamente lo que siempre sufrimos, una incertidumbre galopante. Esta es la historia según este autor, de cómo llegamos a esta Argentina de hoy. Veremos como sigue.

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